Conocida como la "Perla del Sur" o la "Ciudad Roja", Marrakech es un destino encantador que esconde algunos de los lugares más populares de Marruecos tras sus muros de color ocre rojo. La ciudad es también el punto de partida de muchas excursiones para los visitantes que desean explorar la cordillera del Atlas o el desierto más al sur.
Presentación
Marrakech, la segunda ciudad más grande de Marruecos después de Casablanca, está enclavada al pie de las montañas nevadas del Alto Atlas.
Esta ciudad milenaria, donde las tradiciones han permanecido vivas, está dividida en dos partes, la ciudad histórica o medina y la ciudad nueva cuyos principales barrios son el Guéliz y el Hivernage.
La ciudad se ha convertido en la meca del turismo marroquí, acogiendo a más de dos millones de turistas cada año.
Historia
Marrakech fue fundada en 1062 por Youssef Ibn Tachfin, el primer gobernante de la dinastía almorávide.
La ciudad se estableció rápidamente como un influyente centro cultural y religioso con numerosas mezquitas y estaba rodeada de murallas.
La rica historia de esta ciudad, que en su momento fue la capital de Marruecos, sigue siendo evidente en su arquitectura actual.
En 1147, los almohades se apoderaron de la ciudad y construyeron numerosos palacios y edificios religiosos, como la famosa mezquita Koutoubia, construida sobre las ruinas de un palacio almorávide.
La ciudad alcanzó su máximo esplendor a principios del siglo XVI, gracias al sultán saadí Mohamed El Mahdi, que la embelleció restaurando los monumentos en ruinas y construyendo suntuosos palacios.
La medina
La medina (nombre que significa 'ciudad' en árabe) es la ciudad histórica cuyas primeras murallas de adobe se construyeron en 1132. Parte del muro original sigue siendo visible hoy en día.
Se ha ampliado y reurbanizado muchas veces y es un increíble laberinto de calles y callejones.
El inmenso recinto de la medina está atravesado por 19 puertas, siendo las dos principales
Bab Doukkala y Bab Aghmat.
Es dentro de estas murallas donde se pueden admirar la mayoría de los monumentos históricos de Marrakech: la mezquita de la Koutoubia, la plaza de Jamaâ El Fna (clasificada como Patrimonio de la Humanidad en 2001 por la Unesco), así como numerosos palacios.
Sitios y monumentos
Otros lugares turísticos de Marrakech son: la Medersa href='/artículos/arte-y-cultura/museos/artículo-ben--strip-tease-integral---una-vieja-retrospectiva-a-lyon--3720.htm'>Ben Youssef (siglo XVI), la qoubba almorávide (siglo XII), las Tumbas Saadianas (siglo XVI), la Mezquita El Mouassine (siglo XII) y su fuente, y la Mezquita de la Manzana de Oro.
También podrá admirar el Palacio de Bahia y el Palacio de El Badi, así como jardines que datan del siglo XII: los Jardines de Menara y los Jardines del Agdal.
Los amantes de los museos pueden visitar el Museo de Marrakech, el Museo Dar Si Saïd, el Museo de Arte Islámico así como el Museo Bert Flint.
Los zocos de Marrakech
En los zocos de Marrakech, un inmenso laberinto de callejuelas que parte del norte de la plaza Jamaâ el Fna, están representados todos los oficios tradicionales.
Este lugar tan animado se descubre mejor a primera hora de la mañana, aprovechando el frescor de la madrugada. Seguro que encontrará lo que busca en este laberinto que aglutina el mercado de la lana, el de las especias o el zoco de las alfombras y el de los alfareros, donde podrá encontrar platos con Tajine y cerámica vidriada.
Senderismo por Marrakech
Desde Marrakech se organizan numerosas excursiones, principalmente al macizo del Toubkal (70 km al sur) y a los magníficos paisajes de su parque nacional.
También puede tomar la carretera del desierto, siguiendo los antiguos caminos de las caravanas. Se pueden realizar incursiones más largas o más cortas en 4X4 o en quads, pero la mejor forma de disfrutar plenamente de la magia de los grandes espacios del desierto es el paseo en camello.