Menos conocido que el pueblo de Espelette o el de Saint-Jean-Pied-de-Port, Ainhoa no deja de ser una de las maravillas del País Vasco. Con sus fachadas blancas y rojas y su entorno verde, este pueblo merece bien el calificativo de "pintoresco". Este municipio lleno de colores forma parte, además, de los Pueblos más bonitos de Francia.
¿Por qué visitar Ainhoa?
Ainhoa es un pueblo de la región de Aquitania situado en el departamento de los Pirineos Atlánticos, a 25 km al sur de Bayona y a solo unos kilómetros de la frontera española.
Esta antigua bastida fue fundada en el siglo XIII en la ruta de peregrinación hacia Santiago de Compostela... Hoy en día, el municipio sigue siendo una etapa importante en el camino y uno de los pueblos más típicos del País Vasco.
Esta pequeña comuna de menos de 700 habitantes presenta numerosos atractivos para los visitantes:
- el encanto de un pueblo típicamente vasco con su frontón y sus casas labortanas o navarras.
- un entorno verde que mezcla landa, robledal y coníferas y alberga una rica fauna salvaje (corzos, liebres, jabalíes, conejos...).
- una reputación gastronómica, basada en productos locales como el Pimiento de Espelette DOP y el queso Ossau-Iraty.
¿Qué visitar en Ainhoa?
Este pueblo típico del País Vasco deslumbra por su arquitectura notablemente preservada. Con sus casas de fachadas blancas y rojas y su rico patrimonio religioso, ¡es un verdadero pueblo de postal!
La calle principal de Ainhoa atestigua el respeto por las tradiciones locales ya que está bordeada de casas con arquitectura típica, todas orientadas hacia la calle. Las fachadas encaladas están alineadas y adornadas con piedras de sillería visibles o entramados de madera y contraventanas de color rojo o verde. El pueblo también cuenta con un lavadero y un tradicional frontón de pelota vasca construido en 1849.
La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, construida en el siglo XIII sobre una antigua casa fuerte, es representativa de la arquitectura religiosa labortana. Presenta una sola nave, sin pilares y dos pisos de tribunas, llamadas galerías.
La capilla de Nuestra Señora del Espino completa el patrimonio religioso del municipio. La Virgen María se habría aparecido allí a un joven pastor en un arbusto de espino, o arantza, de donde proviene el otro nombre de la capilla (Nuestra Señora de Aranzazu).
Para completar la visita al pueblo, no deje de descubrir el cementerio situado alrededor de la iglesia y sus sorprendentes estelas discoidales y tabulares de los siglos XVI y XVII, así como la Casa del Patrimonio donde se dedica una exposición y una película a la historia del pueblo.
¿Qué ver en los alrededores de Ainhoa?
Ubicado en el límite de la provincia de Labort y Navarra, Ainhoa se encuentra a pocos kilómetros de otros bonitos pueblos turísticos: Itxassou, Espelette y Sare.
Si desean ganar un poco de altura para admirar el pueblo, pueden subir al monte Atsulai, a 389 metros de altitud, siguiendo un viacrucis.
Los aficionados al senderismo también pueden tomar el Sendero del Pottok Azul que conecta los pueblos de Ainhoa, Sare (en el País Vasco francés) y Urdax y Zugarramurdi (en el País Vasco español).
Por último, cabe señalar que el sendero de gran recorrido GR 10 incluye una etapa de Sare a Ainhoa, que atraviesa paisajes muy hermosos.