A diferencia de lo que se cree comúnmente, la salud sexual no se limita a la ausencia de disfunciones o enfermedades como las ITS. Según la Organización Mundial de la Salud, este tema debe ser abordado de manera más integral para que la sexualidad sea una fuente de bienestar y calidad de vida.
La sexualidad, fuente de bienestar o de sufrimientos.
Según el entorno en el que se encuentran las personas, la sexualidad puede ser una fuente de bienestar, realización y elecciones asumidas o, por el contrario, de dificultades y sufrimientos.
Las violencias, las infecciones de transmisión sexual y las elecciones forzadas son tantos obstáculos para la salud sexual. Es por eso que la Organización Mundial de la Salud define este concepto de manera global.
Según la OMS, la buena salud en materia de sexualidad no se limita a la ausencia de enfermedad, disfunción o incapacidad. En 2003, la organización definió este concepto como "un estado de bienestar físico, emocional, mental y social asociado a la sexualidad". Esta definición reciente se ha construido poco a poco, a medida que evolucionan la sociedad y las mentalidades.
El reflejo de la evolución de las costumbres
La comercialización de las primeras píldoras anticonceptivas a mediados de los años 70 provocó una primera revolución sexual al disociar el placer de la reproducción. Cambió las costumbres y comportamientos en materia de sexualidad. Por eso, el término de salud sexual fue utilizado por primera vez por la OMS en 1974.
El año siguiente, la ley Veil que despenalizaba el aborto marcó un nuevo hito. Sin embargo, rápidamente, la epidemia del sida en los años 80 orientó los discursos médicos hacia la prevención y la reducción de riesgos.
Hoy en día, la definición proporcionada por la OMS sirve de base para los programas de salud pública en muchos países, incluida Francia. El objetivo de estos programas ha evolucionado desde la simple prevención de riesgos hacia la mejora de la salud y el bienestar en materia de sexualidad.
Una noción sanitaria pero también social y emocional.
Cuando se considera de manera global, la salud sexual no se limita a aspectos sanitarios. Incluye también una dimensión social y emocional.
Es en esta perspectiva que el Planning Familial trabaja para una sexualidad armoniosa desde hace más de 60 años. Las mujeres son mayoritariamente las víctimas de violencias sexuales dentro de la pareja, independientemente de su educación y de su nivel social, económico y cultural.
Sin embargo, la igualdad entre los compañeros es una de las condiciones para una sexualidad plena. Este bienestar implica un buen conocimiento de su propio cuerpo, de los métodos anticonceptivos y de las infecciones de transmisión sexual, pero también de las nociones de consentimiento y de relaciones respetuosas.
Derechos a defender
Para lograr y mantener una sexualidad plena, es necesario que se respeten, protejan y aseguren los derechos de todas las personas, independientemente de su orientación sexual, prácticas e identidad de género.
Por lo tanto, promover una buena salud sexual no solo se trata de garantizar un buen acceso a la atención médica. Este concepto también implica:
• seguridad y confidencialidad en las interacciones con los profesionales de la salud.
• una comunicación abierta dentro de la pareja, sobre las necesidades y deseos de cada uno, así como sobre sus preocupaciones y límites.
• la ausencia de cualquier coacción, discriminación o forma de violencia en las relaciones sexuales.
Como destaca la definición de la Organización Mundial de la Salud, asegurar el bienestar físico, mental y emocional de las personas en el ámbito de la sexualidad requiere un enfoque integral, que va más allá de la simple prevención y tratamiento de las ITS.
Hoy en día, hombres y mujeres de todas las edades que acuden al Planning Familial buscan respuestas sobre anticoncepción, aborto, ITS y VIH, pero también sobre su orientación sexual o identidad de género.
En el ámbito de la sexualidad, las preguntas y trayectorias de las personas son múltiples. Es por eso que Santé Publique France ha lanzado QuestionSexualité.fr, un portal dedicado que aspira a responder a todas sus preguntas (ver el enlace a continuación).