Ortorexia: ¿cuándo Hay Que Preocuparse?

A diferencia de lo que se puede pensar, comer demasiado equilibrado no es recomendable. Al igual que la anorexia y la bulimia, la obsesión por la comida saludable u ortorexia es un trastorno del comportamiento alimentario. Es mucho menos conocido que la anorexia y, sin embargo, 1 de cada 5 franceses estaría afectado en diversos grados. Aquí está la definición de esta patología, los riesgos que conlleva y una prueba para saber si eres ortoréxico.

¿Qué es la ortorexia?

La ortorexia es una palabra formada por las raíces griegas orthos "recto" y orexis "apetito". Designa una patología que se traduce en la obsesión de querer comer siempre saludablemente. Para las personas ortoréxicas, la calidad nutricional de los alimentos prima sobre su sabor.

Los alimentos placenteros como los dulces, los pasteles, las pastas, las pizzas y muchos otros más están excluidos de la alimentación de las personas que sufren este trastorno alimentario.

Cuando un ortoréxico consume un alimento placentero, inmediatamente se siente culpable y angustiado por su acción.

¿Cuáles son los peligros de la ortorexia?

No hay nada de malo en querer comer saludablemente, me dirán... Es cierto que desde un punto de vista estrictamente nutricional, la ortorexia no presenta ningún riesgo para la salud.

Los únicos riesgos de este trastorno alimentario son de orden psicológico. Esta patología conlleva diferentes comportamientos obsesivos como la dependencia, la exclusión social y sobre todo la pérdida del apetito por vivir.

De hecho, la búsqueda perpetua de la perfección alimentaria lleva a una persona ortoréxica a planificar todos sus días, e incluso toda su vida, alrededor de sus diferentes comidas.

Las personas más afectadas por la ortorexia son los adultos y en particular las mujeres y los deportistas. Estas dos categorías de población están particularmente expuestas al riesgo de desarrollar este trastorno alimentario.

¿Eres ortoréxico? ¡Haz la prueba!

Si está muy preocupado por comer saludablemente y ha excluido de su plato los alimentos que contienen gluten, lactosa, azúcar o carne, puede que sufra de ortorexia. Para estar seguro, realice la prueba a continuación respondiendo con sinceridad a las siguientes preguntas:

- ¿Pasa más de 3 horas al día pensando en su dieta alimentaria?

- ¿Planifica sus comidas con varios días de antelación?

- ¿El valor nutricional de su comida es, a sus ojos, más importante que el placer de degustarla?

- ¿La calidad de su vida ha empeorado, mientras que la calidad de su comida ha mejorado?

- ¿Se ha vuelto recientemente más exigente consigo mismo(a)?

- ¿Su autoestima se ve reforzada por su voluntad de comer sano?

- ¿Ha renunciado a alimentos que le gustaban en favor de alimentos saludables?

- ¿Su dieta interfiere en sus salidas, alejándolo de su familia y amigos?

- ¿Siente culpa cada vez que se desvía de su dieta?

- ¿Se siente en paz consigo mismo(a) y cree tener buen control cuando come sano?


Si ha respondido sí a 4 o 5 preguntas: debería adoptar una actitud más relajada respecto a su alimentación. Al enfocarse menos en la composición de los alimentos, recuperará el placer de comer y de ir al restaurante.

Si ha respondido sí a más de 6 preguntas: puede que sea ortoréxico(a). Se aconseja acudir a un profesional de la salud para discutirlo. No espere a que la comida se convierta en un problema y una fuente de angustia para reaccionar.