Los aficionados a la jardinería conocen bien la zona de los naranjos, es decir, las regiones de Francia donde se pueden plantar cítricos en el suelo sin riesgo. Bajo el efecto del calentamiento global, esta zona antes limitada a una estrecha franja costera está empezando a expandirse. Análisis de un fenómeno que preocupa a los climatólogos.
¿Qué es la zona del naranjo?
En Europa, se habla de la "zona del naranjo" por analogía con la zona del olivo. Se puede definir esta noción de manera aproximada como "la zona de clima mediterráneo donde se pueden cultivar cítricos en tierra firme". En estas regiones de clima suave, los cítricos no solo logran crecer sino también producir frutos de manera perenne.
El Ministerio de Agricultura de los Estados Unidos o USDA define "las zonas de rusticidad" de manera más precisa, utilizando una escala de 0 a 14 con subdivisiones de 5°F designadas por las letras a y b.
En el sistema estadounidense, la "zona del naranjo", en la cual los cítricos pueden dar frutos de manera regular, corresponde a la zona 9b, con temperaturas mínimas comprendidas entre -3,9°C y -1,1°C.
¿Dónde se encuentra la zona del naranjo en Francia?
En Francia, la zona del naranjo corresponde tradicionalmente a una delgada franja de tierra que se extiende entre las costas orientales de los Pirineos y la Costa Azul. Además, es posible cultivar naranjas y limones en otras partes del Hexágono que se benefician de un microclima.
Hoy en día, las áreas de cultivo de cítricos están cambiando bajo el efecto del calentamiento global: mientras que antes era impensable cultivar cítricos fuera del Sur, ahora es posible hacerlo en Gironda.
¿Cómo evoluciona la zona del naranjo en Francia?
Tradicionalmente, la cultura de los cítricos se concentra en el sur de Europa, en España, Italia y Córcega con los limones de Sicilia y las clementinas de Córcega. En el Hexágono, los cítricos son la especialidad de la Costa Azul con el no menos famoso limón de Menton IGP.
Pero, desde hace algunos años, la producción francesa de cítricos se desplaza cada vez más hacia el norte, de tal manera que ahora es posible cultivar naranjas en Gironda. Según los especialistas, esta extensión de la zona del naranjo es uno de los síntomas del calentamiento global. Los climatólogos hablan de una "tropicalización progresiva" de una parte de Francia.
Aunque todavía no vivimos bajo un clima tropical, ya se perciben cambios y los agricultores están en primera línea frente a los riesgos de olas de calor, sequías o, por el contrario, inundaciones.
¿Cómo va a impactar el clima en la agricultura en Francia?
En el futuro, la producción de frutas y verduras en Francia podría ser revolucionada por el aumento de las temperaturas. Aunque el calentamiento no será homogéneo en todo el país y no afectará a todos los sectores durante todo el año, los agricultores deben esperar sufrir pérdidas en sus cosechas.
Un estudio de AXA Climate, publicado en marzo de 2023 en colaboración con la Federación Nacional de Productores de Frutas, estima en un 31 % las pérdidas medias de producción si el calentamiento continúa según el escenario intermedio del IPCC, con un aumento de las temperaturas medias de más de 1,5°C para 2030.
Basándose en el escenario más pesimista del IPCC, hasta un 45 % de las zonas de producción presentarían un riesgo "alto" o "extremo" debido a los fenómenos climáticos. Para llegar a esta conclusión, el asegurador AXA analizó 16 producciones distribuidas en 25 departamentos franceses. Este estudio se centró especialmente en la producción de frutas como la manzana, la grosella negra, la frambuesa, el arándano y la grosella.
Por ejemplo, se desprende que los agricultores franceses tendrán más dificultades para cultivar arándanos y frambuesas. Con la expansión de la zona del naranjo, los productores de frutas podrían tener que reconvertirse en cítricos, kiwis o almendras…