Los jóvenes que poseen un teléfono inteligente y tienen cuentas en las redes sociales corren el riesgo de sufrir acoso en línea. Si usted es padre, la mejor prevención es ser consciente de este peligro y hablar de ello con sus hijos. Aquí tienes una guía práctica para proteger a tus hijos del ciberacoso.
Hoy en día, los niños y adolescentes pasan mucho tiempo en línea, a través de su teléfono u ordenador.
También intercambian muchos contenidos (especialmente fotos y vídeos) en las redes sociales y los juegos en red.
Cabe destacar que el 78% de los jóvenes de 12 a 17 años que poseen un smartphone tienen al menos una cuenta en redes sociales como Instagram o Snapchat.
Sin embargo, esto es suficiente para exponerlos al riesgo de acoso cibernético, una lacra mucho más común de lo que se imagina... De hecho, ¡se estima que el 10% de la población europea ha sido o será acosada en Internet!
Como en la "vida real", el acoso se produce cuando una persona es objeto de violencia verbal y/o moral (apodos desagradables, insultos, burlas, humillaciones, amenazas de muerte, difusión de rumores o información personal, rechazo del grupo...) de forma reiterada.
Se habla de "ciberacoso" cuando esta violencia se ejerce en las redes sociales, por SMS o por correo electrónico.
Aunque el ciberacoso se produzca virtualmente en la red, es importante ser consciente de que tiene graves repercusiones en la vida real: bajada de resultados escolares o abandono de los estudios, pérdida de autoestima, malestar, pensamientos suicidas, etc.
Para detectar el ciberacoso, es fundamental que los padres aprendan a conocer el funcionamiento de las redes sociales.
Aunque no siempre es fácil estar al tanto de las últimas novedades, mantenerse informado sobre las apps que usan tus hijos te ayudará a :
=> discutirlo con ellos
=> enseñarles buenas prácticas en línea
=> detectar posibles situaciones de acoso (intimidación, hostigamiento o amenazas).
Los adolescentes, que están en una edad en la que quieren encajar en el grupo, no suelen desconfiar de las redes sociales. Por lo tanto, corresponde a los padres estar atentos y alertarles de los riesgos de Internet.
No esperes a que tus hijos crezcan y tengan smartphones para hacer prevención.
Por el contrario, hay que hablarles del ciberacoso antes de que sean adolescentes.
Así que si tu hijo te pide que le regales un smartphone por Navidad o por su cumpleaños, aprovecha para sacar el tema.
Explícales qué es el acoso en línea y enséñales a detectar a los "trolls", esos acosadores que son más violentos por esconderse detrás de sus pantallas.
"En la vida real, los acosadores no se atreverían a decir ni una cuarta parte de lo que escriben en la red", explica Samuel Comblez, director de operaciones de e-Enfance, la asociación francesa para la protección de los niños en Internet.
Por ello, esta forma de acoso es increíblemente violenta, especialmente para los jóvenes que aún no tienen la suficiente madurez y confianza en sí mismos para defenderse.
Tal vez su hijo no se atreva a contarle la violencia que vive en Internet... Así que manténgase alerta y reaccione sin demora si nota alguno de los siguientes signos :
=> su hijo se encierra en sí mismo
=> tiene reacciones inusuales al consultar su teléfono
=> parece ansioso y/o cansado
=> tiene problemas de sueño o trastornos alimenticios.
Estas señales deberían alertarle de que su hijo puede ser víctima de acoso escolar o ciberacoso.
Si tu hijo sufre ciberacoso, recuerda que lo primero que hay que hacer es hablar de ello.
Hable con su hijo, tranquilícelo y explíquele que los adultos están ahí para ayudarlo y detener el abuso.
No intentes resolver la situación por ti mismo ni te pongas en contacto con el agresor, ya que esto puede agravar el problema.
En su lugar, póngase en contacto con los números de teléfono gratuitos específicos: 3020 o 0800 200 000.
El 3020 es un número gratuito y anónimo contra el acoso escolar. La línea 3020 está abierta de lunes a viernes, de 9 a 20 horas, y los sábados de 9 a 18 horas, para los niños y jóvenes víctimas de acoso, pero también para los padres y profesionales que presencien los hechos.
Al final, los psicólogos y los profesionales de la educación te ayudarán a salir del estancamiento y a encontrar un lugar cerca de ti donde te escuchen y te apoyen.
Net Ecoute, ofrecido por la asociación e-Enfance en el 0800 200 000, es el número gratuito nacional sobre el tema. Se dirige principalmente a los niños y adolescentes que son víctimas de la violencia en Internet. Este servicio está abierto de lunes a viernes de 9 a 19 horas y ofrece asesoramiento gratuito y anónimo por parte de profesionales sobre las medidas a tomar.
La mayoría de las redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, Snapchat o Youtube permiten denunciar el ciberabuso, pero los niños no siempre son conscientes de ello.
Así que puedes empezar por denunciar contenidos, mensajes o comentarios que perjudiquen a tu hijo. También puede conectarse a la plataforma Pharos (www.internet-signalement.gouv.fr) o al sitio del Punto de Contacto (http://www.pointdecontact.net) para denunciar contenidos ilegales.
En las redes afectadas, deja de responder a los mensajes y bloquea el acceso a todos los perfiles maliciosos.
Concierte una cita con la escuela de su hijo para informar de la situación. Infórmate previamente de los hechos y de los posibles autores y testigos, y haz capturas de pantalla del contenido publicado para tener pruebas del abuso.
En los casos más graves, puedes presentar una denuncia en la comisaría de policía o en la gendarmería. El ciberacoso está castigado por la ley con multas o penas más graves, como servicios comunitarios o prisión.
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