Con el aspecto de un farol japonés cuando está cerrado o de una flor cuando se despliega su cáliz, el physalis se utiliza a menudo para decorar postres festivos. Pero, ¿sabías que esta fruta también está llena de beneficios nutricionales? Aquí hay 5 cosas sorprendentes que hay que saber sobre esta pequeña baya naranja.
1- Es originario de los Andes
Como parece un cítrico en miniatura y tiene la apariencia de una linterna japonesa, a veces se imagina que el physalis es una fruta originaria de Asia. Pero no lo es.
Este pequeño fruto, también llamado cucaracha peruana, es producido por una planta originaria de los Andes: Physalis peruviana. Se encuentra en Colombia, Perú y Bolivia en altitudes de hasta 3200 m.
También se le llama a veces Cape Townrose porque esta planta se aclimató a África muy pronto. Se cultivaba en el Cabo de Buena Esperanza desde principios del siglo XIX.
Todavía hoy, la Physalis peruviana se cultiva en Sudáfrica por su fruto y para hacer mermelada.
Además, a pesar de sus orígenes lejanos, esta planta de la familia de las solanáceas (la misma familia que el tomate y la berenjena) puede cultivarse en Francia. Se encuentra principalmente en Anjou y en la región de Niza.
2- No es sólo decorativo
Envuelto en un cáliz, este pequeño fruto naranja es muy decorativo.
Su aspecto estético le ha valido muchos apodos bonitos y poéticos: amor en una jaula, cerezo de invierno o linterna japonesa.
Pero su lado decorativo no es su única baza. En efecto, esta fruta, que tiene la textura de una cereza, es jugosa y sabrosa cuando está madura. Su sabor recuerda al mango, la grosella y el tomate seco.
Tanto dulce como ácida, puede comerse cruda o en forma de zumo o desecada.
3- Tiene muchas virtudes nutricionales
Bien protegida en su cáliz, la physalis esconde bien su caza.
Esta superfruta está realmente llena de virtudes nutricionales:
- es una excelente fuente de fibra
- es rico en vitamina C
- contiene minerales y oligoelementos.
Aunque este hecho no es generalmente conocido, esta pequeña fruta naranja es más rica en antioxidantes que el arándano y más rica en potasio que el plátano.
Tiene un alto contenido en vitaminas A, B y C, lo que lo convierte en un concentrado de vitalidad.
4- Se puede comer crudo o cocido, salado o dulce
Para aprovechar todos sus nutrientes, se recomienda consumir uchuvas crudas, en el desayuno, como merienda o como aperitivo.
Tal vez haya sentido la curiosidad de morder una de estas frutas que suelen decorar los postres. Pero, ¿ha intentado alguna vez incorporar esta fruta exótica a sus recetas?
Con su textura similar a la de las cerezas, estas frutas pueden utilizarse en postres como el clafoutis de uchuva. Su sabor dulce y picante va bien con el chocolate.
Y lo que es más sorprendente, es posible incorporarlos a las ensaladas mixtas saladas y dulces, en las que aportan un refrescante toque ácido.
5- Es frágil
A pesar de la cáscara que la rodea, la uchuva es una fruta frágil que debe venderse en un recipiente cerrado para protegerla de los golpes.
Su elevado precio se explica porque la recolección es delicada y se realiza a mano.
Para hacer la elección correcta, recuerda cortar la bandeja y elegir la más pesada. Una bandeja demasiado ligera debe hacer temer una fruta deshidratada y poco jugosa.
Cómalos rápidamente después de la compra. De este modo, podrá aprovechar al máximo su contenido vitamínico y sus beneficios nutricionales.
Precaución: los frutos verdes contienen solanina, un alcaloide tóxico cuya ingestión puede desencadenar diarrea o gastroenteritis. Por lo tanto, nunca se debe comer physalis verde ni dejar esta planta al alcance de los niños.