Tipo de yogur espeso originario de Islandia, el skyr es la nueva estrella en el apartado de productos lácteos. Debe su éxito a su bajo contenido en grasas y a su reputación de alimento saciante. Pero, ¿está realmente justificado su alto precio? Les ofrecemos hacer un balance sobre las ventajas y desventajas de esta especialidad láctea del Norte.
El skyr es un producto lácteo que se vende desde hace algunos años en Francia en la sección de yogures y quesos frescos.
Es una especialidad que viene del norte, ya que fue inventada en Noruega, antes de ser importada a Islandia por los vikingos.
Aunque a menudo se presentan como yogures islandeses, los skyrs se diferencian del yogur por su método de producción.
El skyr es un producto a base de leche desnatada pasteurizada, con 0% de grasa.
Para obtener su textura similar a un yogur espeso o a un queso fresco, se añaden fermentos lácticos en la leche desnatada.
Pero, a diferencia del yogur, este producto es luego drenado durante mucho tiempo. Esta fase de la producción es el secreto de su textura muy espesa.
El skyr es un producto lácteo interesante para las personas que quieren perder peso ya que contiene entre 0 % y 1 % de grasa.
Debido a su largo tiempo de drenaje, esta especialidad islandesa también tiene un contenido interesante en proteínas.
El Skyr es a veces presentado como un superalimento, más aún porque contiene calcio, vitamina A y vitaminas del grupo B.
Una porción de 100 g cubre aproximadamente el 15 % de las necesidades diarias de calcio para un adulto. Por lo tanto, este alimento puede contribuir a prevenir la osteoporosis en mujeres después de la menopausia.
Al igual que los yogures, los skyrs contienen "buenas bacterias", beneficiosas para el microbiota intestinal: los fermentos lácticos.
En la sección de productos lácteos, el skyr cuesta entre 3 y 6 veces más caro que un queso fresco light. Dado que este producto está de moda, su precio puede alcanzar picos de alrededor de 9 € el kilo.
Uno podría preguntarse legítimamente si la diferencia de precio con otros productos lácteos light está justificada por un beneficio superior para la salud...
La principal diferencia entre el Skyr y un queso fresco con 0 % de materia grasa radica en el contenido de proteínas: 10 g por 100 g para esta especialidad islandesa, en comparación con aproximadamente 8 g para un queso fresco clásico y 4 g para un yogur natural.
El contenido de proteínas del skyr es 30 % superior al de un queso fresco con 0 % de materia grasa. Pero si encuentras este producto demasiado caro, puedes optar por petits-suisses o quesos frescos clásicos, ya que contribuyen eficazmente a tu ingesta diaria de proteínas.
Las marcas que comercializan skyrs en Francia justifican el alto costo de este producto por su tiempo de drenaje más largo y por la cantidad de leche necesaria para su elaboración. Se necesita más leche para hacer skyr que para fabricar queso fresco o yogur...
El precio exorbitante de este producto también se explica por un efecto de moda. Muchos influencers en el ámbito del deporte han promocionado esta especialidad islandesa en las redes sociales y han alabado sus cualidades nutricionales.
Estas cualidades son muy reales, por lo que no se trata de un engaño como tal. El contenido de proteínas de este producto es realmente interesante para las personas mayores que deben evitar la pérdida muscular y para los deportistas.
Para todos los demás consumidores, existen alternativas casi equivalentes y mucho más baratas. El queso fresco ligero y el yogur natural aportan aproximadamente la misma cantidad de calorías (entre 50 y 60 calorías por 100 g). Estos dos tipos de productos lácteos bajos en calorías son igual de beneficiosos que los skyrs para mantener el peso ideal.
El queso fresco al 0% aporta calcio y buenas bacterias para el microbioma y también puede usarse en lugar de la crema fresca en recetas saladas como una quiche o un flan de verduras.
En resumen, si tienes un presupuesto ajustado, ¡no sucumbas a las sirenas del marketing! Las cualidades nutricionales del skyr y su proceso de fabricación no justifican completamente la diferencia de precio, especialmente porque su supuesto efecto saciante no ha sido claramente demostrado. Según los nutricionistas, la diferencia en el contenido de proteínas entre una porción de skyr o de queso fresco ligero es de solo 2 a 3 g por envase. Es una cifra demasiado baja para afectar la saciedad...
Autor Audrey el 17 March 2023
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