La jubilación progresiva permite ejercer una actividad a tiempo parcial, mientras se percibe una parte de la pensión de jubilación. Tras la reforma de las pensiones de 2023, las condiciones de acceso a este mecanismo han sido modificadas. Les proponemos descubrir lo que cambia en 2024.
¿En qué consiste la jubilación progresiva?
La jubilación progresiva permite, bajo ciertas condiciones, trabajar a tiempo parcial mientras se recibe una parte de la pensión de jubilación.
Más precisamente, este sistema consiste en trabajar a tiempo parcial dos años antes de la edad mínima de jubilación, mientras se cobra una parte de la jubilación.
Un asegurado en fin de carrera puede así reducir su jornada laboral pero continuar cotizando y acumulando trimestres y puntos para la jubilación complementaria, que se tendrán en cuenta en el momento de la liquidación definitiva de su jubilación.
¿Quién puede beneficiarse de la jubilación progresiva?
Desde la reforma de las pensiones, publicada en el Diario Oficial del 15 de abril de 2023, la jubilación progresiva ha sido extendida a nuevos beneficiarios:
- los funcionarios;
- los agentes de los regímenes especiales (EDF, SNCF, RATP...);
- las profesiones liberales (médicos, abogados, arquitectos, notarios, contadores...).
A tener en cuenta: los funcionarios titulares de la función pública pueden beneficiarse de este dispositivo desde el 12 de agosto de 2023 para los funcionarios territoriales y hospitalarios.
Sin embargo, todos los funcionarios activos (policías, guardianes de prisión, aduaneros, auxiliares de enfermería...), que pueden jubilarse antes de la edad legal de jubilación (62 años llevada progresivamente a 64 años de aquí a 2032), no son elegibles.
¿Cuáles son las condiciones que se deben cumplir?
Para beneficiarse de la jubilación progresiva, estas diferentes categorías de activos deben cumplir con ciertas condiciones en términos de trimestres cotizados y duración del tiempo de trabajo.
Los funcionarios sedentarios, que representan aproximadamente el 80% de los empleados públicos, deben haber validado, al igual que los asalariados, artesanos, comerciantes y agricultores, **al menos 150 trimestres de cotización**, sumando todos los regímenes de pensiones básicas.
Para poder beneficiarse de este dispositivo, los funcionarios y los asalariados deben trabajar **entre el 40% y el 80% de un tiempo completo** y los independientes deben reducir sus ingresos profesionales entre un 20% y un 60%.
Con la reforma de las pensiones de 2023 y el aplazamiento progresivo de la edad legal para jubilarse (de 62 años a 64 años), la edad de acceso a la jubilación progresiva evolucionará según el mismo ritmo de un trimestre adicional por año. Pasará **de 60 años a 62 años** para 2032.
Sin embargo, la reforma de las pensiones de 2023 no cambia nada para las personas en jubilación progresiva antes del 1 de septiembre de 2023 o nacidas antes del 1 de septiembre de 1961.
¿Cómo facilita la reforma el acceso a la jubilación progresiva?
Con solo 30.005 beneficiarios en 2023, la jubilación parcial es una posibilidad demasiado poco utilizada según el gobierno. Por eso, la reforma de 2023 desea facilitar el acceso a este mecanismo.
Ahora, un empleador privado o público debe justificar su negativa al paso a tiempo parcial y, por lo tanto, a la jubilación parcial. Debe demostrar, en particular, que el paso a tiempo parcial del empleado o funcionario no es compatible con la actividad económica de la empresa.
Desde el 1 de septiembre de 2023, el empleador también debe dar su respuesta en los dos meses siguientes a la solicitud de jubilación parcial. La ausencia de respuesta equivale a una aceptación tácita.