Si bien el actual contexto inflacionista anima a los franceses a gestionar su presupuesto con más cuidado, también es una oportunidad para cuestionar nuestra relación con el dinero. ¿Sabes cómo aprovechar tus ingresos? ¿Lo que haces con tu dinero te hace feliz? Aquí tienes 5 consejos sobre cómo gastar bien tu dinero para optimizar tu felicidad.
1- Cuidado con las sirenas del consumismo
Tanto si es usted un adicto a las compras como si no, todos hemos experimentado el placer de comprar.
Cuando cedemos al impulso de comprar algo, ya sea una compra largamente premeditada o una más impulsiva, sentimos un subidón de emoción y placer.
Pero, ¿has notado cómo esta alegría es efímera? Para volver a experimentar esta efímera satisfacción, nuestro cerebro nos empuja a comprar más y más cosas y dirige nuestro deseo hacia otros objetos que creemos que harán nuestra vida mejor...
Esta forma de gastar nuestro dinero, aunque nos dé cierta satisfacción, no es la mejor manera de optimizar nuestra felicidad, ya que nos hace perseguir un placer muy efímero.
2- Regálate experiencias en lugar de objetos
Aunque no se trata de dejar de comprar cosas (eso sería absurdo ya que siempre necesitaremos ciertos artículos en el día a día), es importante aprender a gastar el dinero de otra manera para maximizar la felicidad.
Uno de los principios fundamentales para obtener más satisfacción de tus ingresos, por grandes o pequeños que sean, es proveerte de experiencias en lugar de objetos.
Como se ha explicado en el párrafo anterior, la alegría asociada a una compra de material es sólo temporal.
Una vez pasado el placer de la adquisición, nos acostumbramos a poseer ese objeto y lo damos por sentado. Esto se aplica tanto a los objetos pequeños como a los más grandes, tanto a una prenda de vestir como a una casa o un coche.
Además, como siempre hay algo mejor, más grande o más novedoso en otro lugar, es probable que rápidamente nos decepcione o aburra lo que hemos comprado.
Por el contrario, cuando usas tu dinero para regalarte una experiencia como un viaje, no obtienes nada tangible pero sí recuerdos valiosos para el resto de tu vida.
Esta es una alegría que ningún objeto del mundo puede darte. Investigaciones psicológicas muy serias demuestran que la felicidad que se siente es mucho mayor antes, durante y después de la experiencia.
Sientes placer en la anticipación cuando preparas tu viaje (por ejemplo) y en la retrospectiva cuando recuerdas tus vivencias.
Hay que tener en cuenta que las experiencias que te hacen feliz no se limitan a los viajes. También incluyen peregrinaciones, excursiones, visitas culturales, visitas a parques de atracciones, espectáculos y conciertos, sin olvidar las comidas en un restaurante excepcional.
3- Comprar menos para disfrutar más
Otro problema de comprar muchos bienes materiales con tu dinero es que acabas por no apreciar lo que tienes.
Aunque es más agradable vivir en la comodidad material que en la privación, el exceso de posesiones y la abundancia constante pueden tener un efecto negativo en la satisfacción que se siente.
Por lo tanto, otra forma de maximizar la felicidad es posponer la compra de las cosas que queremos.
Diferenciar el acto de comprar no sólo permite saber si uno realmente quiere o necesita el artículo (es posible que algunos deseos desaparezcan por sí solos), sino que también aumenta la satisfacción que se siente cuando finalmente se da el gusto a ese viaje o artículo tan deseado.
Esta experiencia de frustración también sirve para recordar que el consumo no es la única manera de darse un capricho. La anticipación de una compra también es agradable.
4- Date tiempo
El dinero es una herramienta que puede ayudarte a maximizar tu felicidad, pero sólo si lo utilizas bien.
Amasar dinero no es muy satisfactorio si no te permite hacer lo que te gusta en la vida.
Otra forma de gastar dinero para maximizar tu felicidad es proveerte de los servicios de otros para que hagan las cosas que te aburren, como planchar, limpiar o cuidar tu jardín, por ejemplo...
Delegar las tareas tediosas en otras personas te permite liberar tiempo para hacer las cosas que realmente te gustan.
Siguiendo la misma lógica, tiene sentido utilizar tus ingresos para organizar tu vida de la forma más agradable posible.
Esto puede significar elegir un alojamiento más caro pero más cercano a su lugar de trabajo para evitar largas horas en atascos.
Se suele decir que "el tiempo es oro", pero también es cierto que el dinero puede ahorrar tiempo. Sin embargo, tener tiempo libre es esencial para disfrutar de las posesiones materiales.
Entender que el tiempo es más valioso que el dinero puede parecer una obviedad, pero es una idea a tener en cuenta porque cambia tu visión de la vida.
5- Gastar su dinero en otros
¿Te has dado cuenta de que es más agradable gastar dinero en los demás que en ti mismo? De hecho, los estudios demuestran que sentimos más satisfacción al dar un regalo que al recibirlo.
Así que otra forma de maximizar la felicidad es gastar tu dinero en los demás y no esperar nada a cambio.
Para que la alegría de dar funcione, debe hacerse sin ninguna expectativa y, desde luego, sin pensar en un retorno de la inversión.
En otras palabras, tu generosidad debe ser sincera y desinteresada para que sientas la alegría de la misma.