El poder adquisitivo es la principal preocupación de los franceses y estuvo en el centro de la última campaña presidencial. Desempeña un papel importante en la vida cotidiana de los hogares. Con la subida de los precios de las materias primas y la inflación que sigue aumentando, los franceses ven cómo disminuye su capacidad de comprar y mantener un nivel de vida decente. Te proponemos 6 consejos para aumentar tu poder adquisitivo de forma inmediata o, al menos, rápida.
Transporte: Desplazarse de forma diferente
Entre los precios que han subido y que más repercuten en el bolsillo de los hogares, la gasolina se sitúa, sin duda, en primera posición. A veces es difícil prescindir del coche para los que no viven cerca de su trabajo, los que viven en zonas rurales y no tienen tiendas cerca... pero hay puntos de atención que pueden ahorrarte dinero.
En primer lugar, ¿tienes que coger el coche para hacer 2 o 3 recados? Si es así, ¿no puedes hacerlas de camino a casa? ¿Tienes que llevar tu coche al trabajo? Si es así, no puedes intentar compartir coche (Blablacar...), muchas apps te ayudan a encontrar pasajeros, las empresas organizan viajes entre empleados que viven en zonas cercanas. Si no vives muy lejos también puedes empezar a tomar la bicicleta y si tienes bastante subida, muchas bicis con asistencia eléctrica te pueden quitar el esfuerzo. Si vives en una zona urbana, piensa en el transporte público, muchas empresas pagan la mitad de los abonos de transporte de casa al trabajo. Si puedes, tómate uno o dos días a la semana para teletrabajar, tu coche se quedará en el garaje y no gastarás gasolina, peajes de autopista ni plaza de aparcamiento. Por último, algunas Auto-Ecoles ofrecen cursos de conducción suave que te dan consejos para gestionar mejor el desgaste de tu coche (neumáticos, partes mecánicas y gestión del combustible).
Gestione mejor sus suscripciones
En cuanto a los gastos del hogar, hay costes que no existían hace 20 años y que cargan las finanzas: las suscripciones a múltiples servicios.
Suscripciones a Internet, suscripciones telefónicas, suscripciones a servicios de streaming de vídeo y música, suscripciones al servicio de determinadas consolas de videojuegos y muchas otras.
Y si tienes hijos, estos costes pueden aumentar fácilmente. Lo primero es hacer una lista de todas tus suscripciones... y te darás cuenta de que algunas de ellas no las necesitas realmente.
Algunos servicios de streaming te ofrecen un mes de prueba gratuito, aprovecha para ver si realmente vas a utilizar el servicio de streaming.
Mira también a qué tienes derecho en tu abono.
Por ejemplo, Amazon Prime te da acceso a los envíos gratuitos del sitio, al servicio de streaming, a una biblioteca de libros digitales, a una plataforma de videojuegos, a un servicio de música...
En resumen, una oferta completa.
También prefiero las suscripciones sin compromiso que puedes parar y retomar cuando quieras.
En cuanto a la telefonía monitorea tu consumo, tanto en llamadas, SMS, Datos y mira lo que pagas. A menudo, es posible ajustar su paquete a lo que realmente utiliza. Si navegas más a menudo por Internet, contrata un paquete con más Datos, si llamas más a menudo, contrata un paquete de llamadas, si usas más SMS, contrata un paquete de SMS...
Los operadores le permiten cambiar fácilmente sus paquetes aunque esté comprometido por varios meses.
También puedes cambiar de operador en función de las ofertas promocionales, ya que la portabilidad de tu número y toda la gestión será gestionada por tu nuevo operador.
Por último no olvides que si tienes una membresía en un gimnasio, puede ser el momento de comprobar que vas con la suficiente regularidad como para que merezca la pena.
Si no has estado allí durante 3 meses, puedes cancelarlo.
Comprar con sentido común y sensatez
Si puedes prescindir de un servicio de streaming, si puedes prescindir de un gimnasio...
hay algunos costes que no se pueden evitar: son los de la compra de alimentos, el mantenimiento y la higiene.
Al fin y al cabo, todos hacemos tres comidas al día y algunos productos sólo aumentan o varían en función de determinados acontecimientos internacionales. En primer lugar, haz una lista de la compra.
Saber lo que se necesita. Revisa tus armarios, planifica las comidas de la semana (intenta hacer comidas en las que puedas reutilizar ciertos productos), anota cuándo se acaba un producto, si siempre compras en la misma tienda, mira sus ofertas especiales... y una vez en el supermercado o tienda de comestibles, limítate a lo que hay en tu lista.
Una vez en el supermercado, no dudes en comprar productos que puedas conservar fácilmente durante mucho tiempo (pasta, arroz, productos de Higiene o limpieza) en un paquete familiar o en un pack.
Compruebe siempre los precios por kilo o por unidad antes de comprar.
No dudes en comprar productos sin calibre, las famosas frutas y verduras feas que algunos supermercados o productores promocionan vendiéndolas a menor precio.
Una vez cocidos o cortados, ¡sabrán igual! Compre productos que estén cerca de su fecha de caducidad y congélelos, y en algunos productos si se pasa la fecha de caducidad, es una fecha óptima para las cualidades de sabor pero no le pondrá en peligro.
No dude en acudir a su panadero, que a veces puede ofrecer productos del día anterior a un precio más bajo, su carnicero tiene regularmente ofertas especiales, y puede encontrar frutas y verduras al final del mercado con descuento.
Algunas pescaderías ofrecen ofertas a mitad de precio al final del día o el día anterior a la llegada de nuevos peces.
Hay aplicaciones que le ayudan a recuperar la mercancía no vendida (Too Good To Go, Phenix...)
Piensa también en los productores, si tienes la suerte de vivir en una zona rural, puedes recoger directamente frutas y verduras y pagar menos por tu trabajo de recolección (cueillettealaferme.com).
¡¡¡¡Por último, compra en grupo con tus vecinos, amigos y familiares para reducir costes y, si estás solo, ¿realmente necesitas un kilo de calabacines y realmente quieres comerlos todos los días (entreamis.bio...)!!!!
La segunda mano, una verdadera fuente de ahorro
Gracias a Internet y a las aplicaciones móviles, y a las ventas de garaje, hay muchas oportunidades para comprar productos de segunda mano (Vinted...) y ahorrar dinero.
Pero también va en ambos sentidos.
Después de todo, estás sentado sobre un verdadero tesoro.
¿Necesitas esos 20 pares de vaqueros, esos 18 pares de zapatos, algunas de las chucherías de tu abuela, los libros que ya has leído, esa tercera bicicleta que tienes en el garaje?
Elige lo que puedes prescindir. Y venderlo.
Le harás un hueco y ganarás dinero. Y además, haces algo por el medio ambiente.
También hay sitios web y aplicaciones para donaciones (Geev) y préstamos entre vecinos (mytroc.fr).
Al fin y al cabo, no utilizas tu máquina de raclette todos los días, ni tu barbacoa eléctrica, y tu moto pasa más tiempo en el garaje que en la carretera.
Puede ser útil para alguien por poco dinero.
Si no cortas el jardín todos los días, ¿por qué no prestas o alquilas el cortacésped a tu vecino, cuya maleza empieza a invadir el jardín y a molestarte?
Por último, algunas grandes marcas ofrecen la recompra de algunos de sus productos (Kyabi...) y también ofrecen productos de segunda mano (La Fnac...). Como algunos sitios que reacondicionan productos electrónicos y domésticos (Backmarket) y te ofrecen ordenadores, smartphones y otros a precios reducidos bajo garantía y en muy buen estado.
Cupones, promociones y cashback los aliados de sus ahorros
A menudo denostada, a menudo burlada, ¿quién no recuerda una larga espera en la caja de un supermercado porque la persona que está delante de ti está haciendo una larga lista de tickets de descuento?
Afortunadamente, la era digital ha automatizado el proceso.
Descargando aplicaciones dedicadas (joinhoney.com...) puede recibir cupones y hacerlos escanear directamente en la tienda.
Otros te permiten obtener un reembolso directamente en tu cuenta bancaria una vez que hayas fotografiado el recibo, mientras que otros te permiten realizar encuestas (ipsosisay...) y obtener a cambio vales de descuento para sitios de compras.
El cashback existe desde hace muchos años, pero se ha popularizado gracias a Internet, con muchos sitios web y aplicaciones móviles que ofrecen cashback.
El cashback es una técnica de marketing que consiste en descuentos ofrecidos en línea en comercios asociados, a través de la afiliación.
Este descuento (iGraal...) se aplica después de la compra, con un reembolso al consumidor.
En resumen, compras algo y te devuelven el dinero.
Al final, tus compras te cuestan menos y en lugar de recibir un vale, recibes dinero en efectivo.
Por último, algunas aplicaciones te pagan por una acción concreta, por ejemplo, caminar (hacia el oeste) o jugar a videojuegos.
Pero no olvides que si te dan dinero con bastante facilidad es porque tú eres el producto... así que tienes que aceptar anuncios a veces intrusivos.
Gestione su dinero de forma diferente
Muchos influencers te guían para ahorrar dinero, a veces con técnicas disparatadas y otras con inversiones irreales o inasequibles.
Sin embargo, hay una técnica que funciona para todos los bolsillos, la técnica del sobre.
Se trata de poner en sobres, a principios de mes, las cantidades destinadas a cada gasto. Cuando el sobre está vacío no puedes gastar más y si no lo gastas todo tienes algo que guardar.
También piensa en cambiar de banco, algunos neobancos o bancos digitales (Qonto...) tienen comisiones fijas o incluso no tienen comisiones, además son igual de eficientes y seguros que los bancos tradicionales. Algunos neobancos te permiten controlar los límites de gasto de tu tarjeta a través de su aplicación, y algunos prohíben los descubiertos, para que no haya sorpresas desagradables a final de mes.
Por último, Internet y las aplicaciones móviles han democratizado la inversión privada con comisiones muy bajas y la posibilidad de retirar el dinero rápidamente (TradeRepublique, eToro...).
De fácil acceso, comprensibles para todos y accesibles incluso para los principiantes, estas plataformas permiten invertir pequeñas sumas y encontrar inversiones más rentables que un Livret A.
Por último, podemos mencionar a un recién llegado al mercado de las pequeñas inversiones, ISMO, que le ofrece la oportunidad de invertir sus compras. La forma digital de "guardo mis monedas en una caja".
¿Tienes alguna otra idea para aumentar tu poder adquisitivo o ahorrar? Comparte con nosotros tus soluciones en los comentarios.