Mientras los incendios siguen haciendo estragos en Francia, el futuro de nuestros bosques es más que nunca una cuestión prioritaria. Los incendios que asolaron el bosque de las Landas demostraron que nuestro país debe adaptar su gestión forestal al calentamiento global. Para lograr este cambio, la política de prevención de incendios de nuestros vecinos portugueses podría servir de ejemplo.
Incendios récord en Francia
Desde principios de junio de 2022, numerosos incendios asolan los bosques franceses. Más de 47.000 hectáreas de macizos forestales se han esfumado ya desde principios de año en Francia, lo que representa el equivalente a la ciudad de París y parte de los suburbios interiores.
Este triste récord se explica, por supuesto, por las olas de calor que se han sucedido en nuestro país durante varias semanas. Unas condiciones climáticas excepcionales que combinan viento, calor agobiante y Sequía favorecen el inicio de incendios en todo el país y no sólo en el sur de Francia.
Para hacer frente a un riesgo máximo de incendio, las medidas de prevención habituales (como la obligación de desbrozar y la prohibición de encender fuego o de acceder a determinadas zonas) son, por supuesto, necesarias, pero ya no son suficientes. Para proteger nuestros bosques de estos megaincendios, también debemos replantear la gestión forestal, su desarrollo y la elección de las especies.
Repensar los bosques
Los megaincendios que asolaron el bosque de las Landas en julio de 2022 apenas han sido controlados y las autoridades locales ya están pensando en replantar el paisaje devastado. La catástrofe dejó su huella en la mente de la gente, con nada menos que 21.000 hectáreas de bosque quemadas en la Gironda.
Esta catástrofe es impresionante, pero quizás ofrece una oportunidad para adaptar el mayor bosque artificial de Europa a las nuevas condiciones climáticas, sobre todo porque el presidente de la República, Emmanuel Macron, prometió el 20 de julio de 2022 un gran proyecto nacional para reactivar este bosque.
Se están estudiando varias opciones para reconstruir el bosque de las Landas protegiéndolo mejor de los incendios. Algunos quieren reforestar la zona de forma idéntica, otros prefieren dejar que el bosque se regenere por sí mismo y otros quieren plantar otras especies más adaptadas al calentamiento global.
El pino marítimo, que resiste bien la Sequía y abastece a la industria maderera francesa, tiene el gran inconveniente de ser especialmente inflamable porque está lleno de resina. Una mayor diversidad de especies, con la plantación de robles por ejemplo, permitiría frenar la progresión de las llamas ante incendios de menor envergadura.
En los próximos meses, sin duda habrá que replantearse la gestión forestal. En las Landas, no está previsto que la plantación de nuevos árboles comience antes del otoño de 2023. Se calcula que se necesitarán al menos 5 años para restaurar el bosque y 40 años para que el bosque de las Landas vuelva a su estado anterior.
Portugal, un ejemplo a seguir
Fue a raíz de una catástrofe mortal (los históricos incendios de otoño de 2017 que arrasaron más de 560.000 hectáreas de bosque y mataron a 64 personas) que Portugal se convirtió en un modelo de gestión forestal y prevención de incendios.
El país ha cambiado la forma de gestionar el riesgo de incendios forestales abordando directamente las raíces del problema: la falta de mantenimiento, la falta de información a la población y el predominio de los eucaliptos altamente inflamables.
El gobierno portugués decidió prohibir la plantación de eucaliptos y se embarcó en un completo rediseño del paisaje en el centro y el norte del país. Además, ha decidido incrementar la conciencia pública sobre el riesgo de incendios forestales e informar mejor a los habitantes sobre la elección de las rutas de evacuación.
Portugal ha creado una agencia de gestión de incendios o Agif (enlace más abajo) para llevar a cabo una política integral de prevención que incluye diferentes medidas:
- mantener las zonas rurales
- tala de eucaliptos cerca de los pueblos
- replantación de especies arbóreas locales
- desarrollo de pastos ecológicos con cabras y ovejas.
Esta política de gestión forestal y prevención de incendios interesa ahora a otros países europeos, como Francia, pero también a otras partes del mundo que se ven afectadas a menudo por los incendios, como Australia, California y Sudáfrica.