El Orient-Express es sin duda el tren más famoso de la historia del ferrocarril. Ciento cuarenta años después de su viaje inaugural, sigue haciendo soñar a los viajeros de todo el mundo. Le proponemos recorrer la saga de este tren de lujo, que antaño era el medio de transporte privilegiado de las cabezas coronadas europeas.
1883: la puesta en servicio del Orient-Express
El Orient-Express fue inaugurado el 5 de junio de 1883 bajo el nombre de Expreso de Oriente.
En sus inicios, circulaba dos veces por semana en lo que entonces era el primer ferrocarril internacional del mundo.
Aseguraba la conexión entre París (estación de París-Este) y Constantinopla (la actual Estambul) pasando por Estrasburgo, Múnich, Viena y otras ciudades europeas.
Este tren no solo atravesaba Europa. También ofrecía a sus pasajeros un entorno lujoso que contribuyó a forjar su leyenda.
El período de entreguerras: la edad de oro del Orient-Express
A finales del siglo XIX, los viajeros del Orient-Express realizaban el viaje de París a Constantinopla, un trayecto de 2800 km, en solo 2 días y 3 noches.
En 1894, la Compañía de vagones-cama abrió, para los pasajeros del tren, varios hoteles de lujo en Constantinopla, entre ellos el Pera Palace.
El 30 de mayo de 1906, se inauguró el túnel del Simplon, que conectaba Suiza con Italia y acercaba París a Venecia. Desde entonces, el Express de Oriente conectaba directamente París con Constantinopla vía Venecia y Trieste.
A partir de 1919, el tren rebautizado "Simplon-Orient-Express" conectaba Calais-Marítimo y París-Gare du Nord, así como París-Gare de Lyon, con Estambul y Atenas vía Lausana, Milán, Verona, Venecia, Trieste, Zagreb, Belgrado, Sofía y Salónica. Es en este tren, en el sentido Estambul-Calais, donde se sitúa la acción de la famosa novela de Agatha Christie Asesinato en el Orient Express.
A tener en cuenta: este tren mítico ha inspirado a numerosos escritores, como Agatha Christie, Paul Morand o Paul Valéry. Ian Fleming, el creador de James Bond, lo utilizó como escenario en la novela Desde Rusia con amor.
El Orient Express conoció su edad de oro en el período de entreguerras. En los años 1920 y 1930, era el modo de transporte privilegiado de las cabezas coronadas europeas, de los aristócratas y de las celebridades. Entonces se le apodaba "El Tren de los Reyes, el Rey de los Trenes".
Este tren mítico acogió a bordo a Coco Chanel y Sigmund Freud, así como a Joséphine Baker y la espía Mata-Hari. Pasajeros a la altura del más prestigioso de los trenes...
Declive y renacimiento del Orient-Express
La Segunda Guerra Mundial frenó brutalmente el auge del Orient-Express y la llegada de los transportes aéreos inició su declive. El servicio regular hacia Estambul y Atenas cesó en 1977, debido a la creciente competencia del avión.
Sin embargo, en 1982, un empresario británico, Sir James Sherwood, decidió revivir la leyenda del Orient Express. Reconstituyó, con material de origen restaurado, un nuevo tren de lujo.
Este tren bautizado Venecia-Simplon-Orient-Express y gestionado por una compañía privada asegura hoy en día la conexión Boulogne-sur-mer - Calais - Venecia, vía París, Innsbruck o Viena, con a veces una extensión hacia Estambul. Con sus coches azules y dorados, este tren le propone vivir un viaje de leyenda en el corazón de Europa (ver el sitio oficial abajo).
En 2003, la Compañía de los vagones-cama también restauró siete coches de su patrimonio histórico y los puso en servicio en un tren denominado Pullmann Orient-Express. Este tren propone principalmente cenas-viaje con salida desde París.
Más recientemente, la compañía Orient Express encargó al arquitecto Maxime d’Angeac la misión de hacer renacer este tren de leyenda reinterpretando los decorados del Nostalgie-Istanbul-Orient-Express. Los lujosos coches inspirados en los años 1920 y acondicionados en colaboración con los mejores artesanos franceses deberían ser desvelados en 2025.