Durante el verano, no sólo las flores y las verduras del jardín sufren las olas de calor. Las plantas de interior también necesitan cuidados especiales cuando hace calor. Aquí tienes 5 consejos prácticos para cuidar tus plantas verdes durante una ola de calor.
1- Comprobar el suelo más a menudo
Las plantas de interior, en su mayoría de origen tropical, están acostumbradas a temperaturas que oscilan entre los 18 °C y los 28 °C. Por ello, incluso en períodos de ola de calor, como los que está viviendo Francia este verano, son muy capaces de soportar el calor.
Para ayudarles a superar estos periodos de calor sin sufrir daños, sólo hay que adaptar los cuidados que se les suele dar, empezando por la frecuencia de los riegos.
Como el aire es más seco cuando hace calor, primero debes comprobar el estado del follaje y del suelo más a menudo para asegurarte de que tus Plantas verdes no tienen sed.
Aunque los rocíe regularmente para compensar el aire seco, tenga en cuenta que la pulverización no sustituye al riego.
2- Utilice agua a temperatura ambiente
Cuando hace calor, es importante utilizar agua a temperatura ambiente para regar. Cuidado: regar con agua fría no enfría las plantas. Por el contrario, podría provocar su muerte debido al choque térmico que sufren las raíces.
Otro error que hay que evitar es regar demasiado las plantas porque hace calor. ¡Riegue preferentemente por la mañana o por la tarde, cuando no haga demasiado calor, pero no ahogue sus plantas verdes por todo ello!
3- Proteger las hojas de la luz solar directa
Aunque algunas de tus Plantas verdes estén acostumbradas a estar cerca de las ventanas, debes extremar la vigilancia cuando hace calor.
Como regla general, es aconsejable evitar la exposición al sur para las Plantas de interior de todos modos. Cuando el tiempo es muy caluroso y soleado, el riesgo de quemadura de las hojas es aún mayor.
Por eso, si ves que algunas de tus plantas reciben demasiado sol y sus hojas empiezan a quemarse, lo mejor es moverlas a una zona más sombreada de tu casa.
4- Mantenga su casa fresca
Tenga en cuenta que todas las acciones que le permiten enfriar su casa son beneficiosas para las plantas que la habitan.
Aire a primera hora de la mañana y a última de la tarde cuando las temperaturas son frescas y luego cierre las persianas y cortinas durante el día para evitar que el calor entre en su casa.
Precaución: si utiliza un ventilador para enfriar, no dirija el flujo de aire hacia sus plantas. A la mayoría de las Plantas de interior no les gustan las corrientes de aire.
El fuerte movimiento de aire aumenta la evaporación del agua y, por tanto, corre el riesgo de secar aún más las plantas y hacer que se marchiten.
5- Crear un microclima
Cuando hace calor, las plantas verdes sufren más por el aire seco que por las altas temperaturas. La forma más eficaz de remediarlo es crear un microclima húmedo alrededor de tus plantas de interior.
Para ello, basta con reunirlos alrededor de una palangana llena de agua. También puedes utilizar agua reciclada, como el agua de lavar las verduras.
Si quieres proporcionar humedad a una sola planta, también puedes colocarla sobre un lecho de bolas de arcilla humedecidas. Coloca las bolas de arcilla en un platillo y mójalas antes de colocar la planta en ellas.
A medida que el agua se evapora, creará humedad alrededor de su planta. Por lo tanto, este método es más eficaz que la simple pulverización del follaje con agua de vez en cuando.
Si vas a estar fuera varios días, puedes incluso colocar toallas húmedas en el fondo de la bañera y reunir allí tus plantas para que se beneficien de la humedad ambiental y puedan soportar mejor el calor.