Recuperar semillas directamente de las plantas es una buena manera de jardinear sin arruinarse. Pero, para que este truco funcione, ¡es necesario proceder a la cosecha en el momento adecuado y de la manera correcta! Vamos a explicarte cómo cosechar las semillas de las flores y los vegetales de tu jardín.
1- ¿Por qué recolectar tus propias semillas?
Nuestros abuelos solían recoger las semillas de las flores y los vegetales de su huerto por razones esencialmente económicas.
Aunque cada sobre de semillas no cuesta mucho, el presupuesto global que un jardinero debe dedicarle termina representando una suma considerable. Un buen truco para jardinería económica consiste en recuperar de las plantas semillas que no te cuestan nada.
Este gesto ancestral también es muy satisfactorio para los jardineros principiantes o experimentados porque permite reproducir ciertas plantas y variedades particularmente vigorosas y productivas. Pero atención, ¡este truco funciona exclusivamente con variedades no híbridas! Solo las variedades llamadas "fijadas" son reproducibles idénticamente.
2- ¿Cuándo cosechar las semillas en el jardín?
La principal dificultad para recoger las semillas en su jardín es decidir cuándo proceder a esta recolección. En general, es hacia el final del verano, en los meses de agosto y septiembre, cuando la mayoría de las semillas alcanzan la madurez.
No hay una fecha o período preciso para hacerlo porque todo depende de la variedad de flores o vegetales que desee reproducir. Para cada variedad, se debe observar atentamente la planta. Algunos signos como el secado de las flores o vainas indican que ha llegado el momento de recuperar las semillas.
Para el girasol, por ejemplo, se procede a la recolección en otoño cuando las semillas están maduras. La envoltura que las rodea o tegumento cambia de color al madurar y se vuelve beige crema, a veces rayada de negro.
¡Esté atento para recolectar en el momento adecuado! Por un lado, debe esperar a que las semillas estén maduras y secas. Pero, por otro lado, no debe tardar demasiado, de lo contrario, el viento o la propia planta dispersarán las valiosas semillas antes de que pueda recuperarlas.
3- ¿Cómo recolectar las semillas de flores y vegetales?
Antes de proceder a la recolección de las semillas, es importante observar la planta y, si es necesario, documentarse en Internet porque cada especie tiene órganos reproductores diferentes. Debe identificar de antemano la parte de la planta que contiene las semillas.
El guisante de olor, por ejemplo, produce vainas llenas de semillas grandes, mientras que las flores de las amapolas se transforman en cápsulas secas llenas de semillas pequeñas... En la gran familia de las plantas hortícolas, algunos vegetales como las habas y los frijoles hacen vainas, mientras que otros como los tomates y los pimientos contienen sus semillas dentro del fruto.
En todos los casos, hay que dejar las vainas o los frutos en la planta hasta que estén muy maduros, secos, arrugados o incluso marchitos, antes de abrirlos para recuperar las semillas.
4- ¿Cómo recuperar las semillas sin perder ninguna?
Si alguna vez ha intentado recolectar las semillas de algunas flores o hierbas aromáticas como la albahaca, seguramente habrá notado que las pequeñas semillas no son tan fáciles de recuperar.
Mientras que la recolección no presenta ningún problema con frijoles en grano o con grandes flores como el girasol, es más delicada cuando la semilla es pequeña y ligera o cuando la cápsula que las contiene explota al menor contacto...
En este caso, un truco para no perder las semillas consiste en golpear la planta seca directamente en una bolsa de papel. Puede proceder de esta manera con las espigas florales marchitas de la albahaca o con las plantas umbelíferas como el perejil, el perifollo, el cilantro o el hinojo perenne.
Para algunas frutas y verduras, como el tomate y el melón, es necesario enjuagar las semillas y secarlas antes de almacenarlas.
5- ¿Cómo conservar las semillas después de la cosecha?
Ahora que sabe cómo recolectar las semillas en su jardín, quizás se pregunte cómo almacenarlas y conservarlas hasta el año siguiente…
Para evitar el moho, es mejor no usar recipientes demasiado herméticos, como frascos de vidrio o tubos de plástico. Es preferible deslizar las semillas en pequeños sobres o bolsas de papel.
Para almacenar sus semillas en condiciones óptimas de conservación, recuerde siempre:
• anotar en el sobre el nombre completo de la planta, es decir, la especie y la variedad.
• indicar la fecha de la recolección, ya que las semillas recolectadas por usted mismo no se conservan más de un año.
• reunir todos los sobres en una caja grande hermética tipo Tupperware.
• guardar la caja protegida de la humedad y la luz.