Con su follaje rosado muy original, el sauce camarón es la estrella indiscutible de los jardines urbanos. Aquí está todo lo que necesitas saber antes de adoptar este arbusto caducifolio originario de Japón. Te explicaremos cómo plantarlo, cuidarlo y podarlo para resaltar la belleza de su follaje.
La mejor temporada para plantar un sauce llorón en su jardín es la primavera o el otoño, fuera de los períodos de heladas y altas temperaturas.
Así, para plantar su arbusto, tiene la opción entre el período que va de febrero a mayo o el que va de octubre a diciembre.
En los viveros, la oferta es más variada en primavera, cuando los arbustos Salix integra ‘Hakuro Nishiki’ comienzan a desplegar su notable follaje blanco y rosado.
Cabe señalar: si desea que su sauce permanezca decorativo en invierno, elija la variedad Salix integra Flamingo que muestra tallos rojos una vez que el follaje ha caído.
Como todos los arbustos de la familia de los sauces, el sauce camarón prefiere tener las raíces frescas. Por lo tanto, es necesario evitar plantarlo en un lugar demasiado cálido. Al momento de la plantación, considera acolchar su base para retener la frescura del suelo.
Si la configuración de tu terreno lo permite, puedes plantarlo cerca de un cuerpo de agua. Si deseas plantarlo como ejemplar aislado, en un césped por ejemplo, deberás elegir su ubicación con cuidado, para que disfrute de una exposición a media sombra o bajo un sol suave.
Atención: ¡una exposición demasiado cálida y soleada puede quemar las hojas jóvenes rosadas que son todo el encanto de este arbusto!
Cuando se siente a gusto en su ubicación, el sauce japonés es un arbusto bastante fácil de mantener. Sus dos únicas exigencias son un suelo fresco y una poda anual.
Durante los dos primeros años después de la plantación, deberá recordar regarlo abundantemente 2 a 3 veces por semana, especialmente durante los períodos calurosos.
La regularidad del riego permite a este arbusto desarrollar su sistema radicular. Para estimular su crecimiento, también puede aportarle un poco de compost cada año en otoño.
La poda del sauce japonés es un gesto de mantenimiento esencial para que el arbusto conserve los hermosos colores de su follaje.
Esta operación permite de hecho estimular la aparición de nuevos brotes. Y es que son las hojas jóvenes las que presentan el color blanco-rosado, dando la impresión de que el arbusto está en flor…
Este arbusto debe ser podado cada año al final del invierno, entre finales de febrero y marzo, según su región. Debe proceder a la poda antes de la aparición de los brotes.
La poda del Salix integra Hakuro Nishiki no debe ser demasiado severa. Basta con acortar las ramas en aproximadamente un tercio de su longitud, utilizando unas tijeras de podar bien afiladas y desinfectadas.
Aproveche esta intervención:
• para eliminar ramas muertas.
• para contener la altura y el tamaño del arbusto en espacios pequeños.
• para dar a este arbusto decorativo una forma regular, por ejemplo, una forma de bola que resalte su follaje.
El amarillamiento de las hojas de un sauce llorón puede ser un signo de falta de agua. Si observa que las hojas están blandas, amarillas y caen, aumente los riegos.
Si su sauce aún está en una maceta, antes de plantarlo, incluso puede sumergirlo en un recipiente para que el cepellón se rehidrate.
Para salvar su arbusto después de un estrés hídrico:
• colóquelo a resguardo y a la sombra, especialmente durante períodos de mucho calor.
• continúe con los riegos de manera regular.
• no deje agua estancada en su base, por ejemplo, en un platillo para un ejemplar en maceta. ¡A los sauces les gustan los suelos frescos pero no empapados!
¡Cuidado con no mojar el follaje durante los riegos! Un exceso de humedad en las hojas puede favorecer la aparición de enfermedades criptogámicas como el oídio (reconocible por el recubrimiento blanco en las hojas) y la antracnosis (que provoca manchas marrones o negras en las hojas).
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