Después de un duro día de trabajo, es estupendo volver a la cama con una almohada suave y limpia... Es fácil lavar las fundas de almohada para mantenerlas frescas. Pero, ¿sabe usted cómo lavar sus almohadas y lo hace con la suficiente frecuencia? Te explicamos cómo lavar una almohada según su material.
¿Con qué frecuencia debo lavar mis almohadas?
Según un estudio británico, las almohadas deben lavarse a fondo cada dos meses. Esto se debe a que la almohada sobre la que apoyas la cabeza cada noche absorbe tu transpiración y saliva y acumula pieles muertas.
Además, constituye un ambiente cálido y húmedo, propicio para el desarrollo de ácaros y bacterias... Por eso, aunque no sufras de alergia a los ácaros, debes planificar un mantenimiento regular de tus almohadas para dormir en un ambiente saludable.
Como ves, para dormir en una cama limpia, debes lavar las fundas de las almohadas al menos cada dos semanas, ¡pero también la propia almohada! Este lavado se recomienda cada dos meses de media e incluso cada mes para las personas que sufren alergia a los ácaros.
El mantenimiento debe ser aún más regular en otoño e invierno, ya que son las estaciones más propicias para la proliferación de ácaros debido a la calefacción y a la falta de ventilación en el hogar.
¿La almohada debe lavarse a mano o a máquina?
Para saber si su almohada es lavable a máquina y qué temperatura de lavado utilizar, debe consultar la etiqueta.
Todo depende del modelo que tengas y del material con el que esté rellena... Por regla general, las almohadas de plumas o plumón, así como las almohadas sintéticas, pueden soportar un ciclo de lavado de 40°C.
Antes de lavar a máquina, también debes comprobar que tu almohada no tiene agujeros, ya que su relleno podría escaparse, con consecuencias desafortunadas para la almohada pero también para tu lavadora.
Si quieres lavar varias almohadas que entren en la máquina, ten en cuenta que no debes llenar el tambor más allá de las tres cuartas partes de su capacidad. Recuerda también poner la velocidad de centrifugado de tu lavadora en un centrifugado lento.
¿Cómo se hace un lavado de manos?
Si su almohada no es lavable a máquina, puede lavarla a mano.
En este caso, basta con sumergir la almohada en un recipiente con agua tibia y ligeramente jabonosa y frotar suavemente. A continuación, aclare bien la almohada bajo la ducha. Es más fácil aclararlo con la alcachofa de la ducha que con el grifo.
Por último, deja que se seque en plano. El secado al aire llevará varias horas, o incluso días. Si puedes, prefiere el secado a máquina: pon tu secadora a fuego lento y añade dos pelotas de tenis al tambor para que las almohadas se esponjen.
Cuidado: algunas almohadas de látex o espuma viscoelástica no se pueden lavar, ni siquiera a mano. Para facilitar el cuidado, estos modelos suelen venir con una funda que puedes quitar y lavar a máquina.
Para el cuidado adecuado de una almohada de látex o de espuma viscoelástica, es aconsejable:
- ventilar la almohada todos los días
- Lavar la funda y la almohada cada 10 días.
¿Cómo lavar una almohada amarillenta?
Con el tiempo, es común que la transpiración provoque halos amarillos en las almohadas.
Si tu almohada tiene este tipo de manchas amarillas, puedes aprovechar para limpiarla cada dos meses para eliminar las manchas con quitamanchas.
También puedes hacer que el tejido sea más blanco sumergiendo la almohada en un recipiente con agua caliente y un vaso de peróxido de hidrógeno al 30%.
Si quieres utilizar un truco más natural, sustituye el agua oxigenada por el zumo de 10 limones y déjalo en remojo durante 2 horas antes de lavarlo a máquina o a mano.
Otro consejo para blanquear es diluir 500g de bicarbonato de sodio en agua caliente.
¿Cuándo debo cambiar mi almohada?
Por último, aunque lave su almohada con regularidad, es aconsejable cambiarla cada dos años de media.
A pesar de todos los cuidados que les das, las almohadas acaban aplastándose y ensuciándose. Por lo tanto, es importante renovarlos regularmente para mantener sus noches confortables.