Si se confía en los resultados de un estudio europeo publicado el 8 de noviembre de 2023, más de la mitad de los hogares franceses que cocinan con gas están expuestos a niveles de dióxido de nitrógeno superiores al umbral recomendado por la OMS. Les proponemos descubrir en qué consiste esta contaminación, cuáles son los riesgos para la salud y los medios para protegerse.
Una contaminación silenciosa relacionada con la cocción a gas.
Investigadores de la Organización Neerlandesa para la Investigación Científica Aplicada, o TNO, han colocado sensores en viviendas de 7 países europeos durante cinco meses para medir la exposición de los habitantes al dióxido de nitrógeno emitido durante la cocción con gas.
Este estudio se llevó a cabo en los Países Bajos, pero también en Italia, España, Francia, Reino Unido, Eslovaquia y Rumanía. Fue publicado el 8 de noviembre de 2023 y reveló conclusiones preocupantes.
Revela que el 53 % de los hogares franceses que utilizan la cocción con gas para las placas de cocina o para el horno superan el umbral diario recomendado por la Organización Mundial de la Salud para la exposición al dióxido de nitrógeno o NO2. A pesar de la presencia de una campana extractora, este gas deteriora la calidad del aire interior, lo que no está exento de consecuencias para la salud de los ocupantes de estas viviendas.
Un gas nocivo para las vías respiratorias
El riesgo de contaminación del aire interior debido a la cocción con gas no es un descubrimiento reciente. La OMS ya ha dado la alarma sobre este asunto, indicando que los niños que viven en hogares equipados con este modo de cocción presentan un 20 % más de riesgo de sufrir enfermedades respiratorias debido al dióxido de nitrógeno.
El dióxido de nitrógeno tiene un efecto perjudicial sobre el sistema respiratorio: provoca una inflamación de las vías respiratorias, tos, silbidos, una reducción de la función pulmonar y un aumento de las crisis de asma, especialmente en los más jóvenes.
El estudio neerlandés que acaba de publicarse no solo confirma los peligros de la cocción con gas. También proporciona una evaluación más precisa de esta contaminación. Según los investigadores, los niveles de concentración de dióxido de nitrógeno son “casi el doble en los hogares que utilizan aparatos de cocción a gas que en aquellos con aparatos de cocción eléctrica”.
Además, según otro estudio publicado a principios del año 2023, casi 150.000 niños en Francia presentan síntomas de asma debido a la exposición a esta contaminación.
Un contaminante difícil de eliminar en las viviendas
Ante la amenaza del dióxido de nitrógeno emitido durante la cocción a gas, se podría pensar que basta con ventilar la vivienda después de cocinar. Aunque es cierto que la ventilación ayuda a limitar la exposición al dióxido de nitrógeno, los investigadores insisten en que esta solución no es perfecta.
Según los autores de este estudio neerlandés, "los picos de contaminación en los hogares franceses que cocinan con gas podían durar varias horas y eran tanto más intensos cuanto más tiempo permanecían encendidos los aparatos de cocción."
Cuando se cocina a fuego lento un plato con gas durante largas horas, la contaminación relacionada con este método de cocción no se limita a la cocina sino que se extiende por todo el alojamiento. Por lo tanto, sería necesario abrir las ventanas en todas las habitaciones.
Para limitar la exposición a esta contaminación interior, la mejor solución consiste en optar por la cocción eléctrica. De hecho, a diferencia de las cocinas de gas, las cocinas y placas eléctricas pueden utilizarse durante largas horas sin alterar el nivel de dióxido de nitrógeno en el aire interior.
También se recomienda equiparse con campanas extractoras especialmente diseñadas para reducir el nivel de partículas emitidas durante la cocción.
La Asociación Respire, que aboga por una mejor calidad del aire, solicita la implementación de un etiquetado específico en los electrodomésticos para indicar a los consumidores su tasa de contaminación.